viernes, 15 de agosto de 2008

13 Agosto 2008

Empiezo a kreer ke inkoncientemente kería mojarme los senos, ya ke pese al tenue cielo ke amenazaba inklemente kon aguaceros bravos yo encerré los sacos en el cajón y me apresté a salir a la kalle rápidamente para tener a la prisa como coartada y no parecer una deskarada. Fue entonces kuando te vi pasar y nos rozamos las pieles en un adiós eterno en medio de los 8 segundos ke duró. Al anochecer kuando venía de vuelta a kasa las gotas chuzaban mi pecho y yo fantaseaba kon ke eran tus dedos, mi piel se ponía más firme y sonreía porke sentía ke tales goterones ahora eran tus babas.

Excitada por la lluvia inmensa iba hacia mi kasa sin prisa alguna, pensando en los dedos de tus manos grandes. Así, mientras todos korrían desesperados komo si el agua no fuera tal, fuera más bien ácido askórbiko ke los mataría al instante o los desnudaría dejándolos en huesos, yo seguía inmutable, muy despacio y lloviendo también por los ojos porke no era precisamente un buen día, en parte porke junto a la emoción ke me proponia girar komo una pirinola en kada uno de los postes de la luz, también estaba la tristeza de saber ke ese hasta luego había sido realmente un hasta nunka, una de esas miradas de ya todo esta superado y los dos somos adultos, maduros, realistas, y determinados y ante tales mentiras ke más podía decir, decirte ke me hacías temblar kon sólo aparecer, decirte ke mi memoria sólo servía para guardar tu olor (KONTINÚA….)

No hay comentarios: