lunes, 19 de mayo de 2008

14 Abril 2008

Y escuchar el baile y el salón mil veces y fumarme un par de cigarrillos y pensar en tí pero no komo la amante estúpida, como el ratón enamorado de la luna sino komo la k tiene la certeza k también la aman, la extrañan y la desean, porke haces falta, inundas mis sueños, mis noches, mis días, mis alegrías, mi salud, mis enfermedades, mi cuerpo, mis aromas, los aromas que percibo, las imágenes que observo, las palpitaciones que experimento. Porke estoy enamorada de mi ultima salida que se presenta komo tú, eliminando tanto síntoma normal, que me ha dado el favor el tiempo de experimentar, y entonces yo que he jugado ya me empiezo aburrir. Apareces tú tú tú komo lo nuevo, lo brillante, lo misterioso, lo difícil, lo prohibido, lo dulce, lo sustancioso, lo ke tiene un sabor real k no solo se siente kon los labios sino kon el cuerpo, las entrañas, quizá el korazon o kon otro órgano kualkiera y menos nombrado. Kiero ir despacio, tan despacio komo lo permita la ansiedad de kerer devorarte, de kererte dentro de mí para explotar, explotar de la emoción, de la alegría, de la euforia. Komo droga sicodélica que invade la telita de los ojos kon luces ke se sienten kon todo lo de aki, lo de allí , kon lo bonito de arriba y lo eskondidito de abajo o si kieres algo bien raro kon lo del lado; eres la primera de mis ultimas esperanzas lo k sueño sin tokar por miedo a terminar.